El glaucoma es una enfermedad donde el ojo va perdiendo la visión de manera gradual. Sin el tratamiento adecuado, el glaucoma puede conducir a la ceguera.
Es importante conocer que durante las primeras fases de la enfermedad no se presentan síntomas, por lo que sólo podrá detectarse a través de los exámenes oftalmológicos periódicos. La detección temprana junto con un tratamiento adecuado logrará preservar la visión del paciente.
Esta enfermedad puede presentarse tanto en niños como en adolescentes o adultos, pero las personas con mayor riesgo de desarrollar el glaucoma son:
- adultos de edad avanzada,
- individuos con antecedentes familiares de glaucoma,
- personas con miopía,
- pacientes diabéticos